17 enero 2007

¿Cuántos teras tiene tu casa?

Domingo por la mañana. Hoy es el día, ya no puede esperar más. d1390 acomete por fin la ardua tarea de organizar los cajones de su casa, con el firme propósito de reciclar todo aquello que ya no utilice. "Empezaremos por éste...". Elige un cajón de su escritorio que cree no haber abierto en años. Una sensación de sorpresa se mezcla con la ternura agridulce del recuerdo. Ante sus ojos, no menos de diez dispositivos de variados colores, diseños y prestaciones. Algunos con funciones de teléfono móvil, los más antiguos tan solo con capacidad para reproducir audio y vídeo. "Lo que pagué por este Apple iPhone 3, por estos míseros 100 GB que entonces nunca pensé que llenaría... Conseguí centralizar todas mis fotos y mi música en él, y vaya si me costó; echando la vista atrás, qué suerte tuve de que no se me rompiera..."

d1390 recordaba esa época en la que entre los reproductores de contenidos reinaban aquéllos que ofrecían un puñado más de gigas que el resto, y a qué precios. En la que tenía sus canciones dispersas entre su PC, su iPod, su móvil y su PDA. Sus fotos, en todos esos sitios y en sus varias cuentas de correo electrónico, si algún amigo se las había mandado. Esa época en la que se hacía tan tedioso pasar un vídeo de un dispositivo a otro que al final se resignaba tácitamente, como todo el mundo, a que "esta peli se ve sólo en la tele, este vídeo sólo en el iPod". Y es que los dispositivos no estaban permanentemente conectados a la red, de hecho ¡había que pagar por tráfico o tiempo de conexión! No hacía tanto tiempo de ello...

Y se acordó de cómo le picó la curiosidad cuando 54r4 se mudó a su casa nueva, con Repositorio Doméstico de Contenidos. Un repositorio donde ella guardaba todas sus fotos, sus vídeos, sus documentos... y accedía a ellos desde cualquier lugar, en cualquier momento, desde cualquier dispositivo, que ya nunca tenía más de unas cuantas decenas de gigas de capacidad. Con la tranquilidad de saber que, si sacaba una foto, podría verla sin esfuerzo en cualquier dispositivo, y la tendría automáticamente guardada en casa.

Y de cómo un par de años después, cuando él también se mudó, ya no le pareció extraño que 54r4, antes que por los metros cuadrados, le preguntara: "¿Cuántos teras tiene tu casa?".

1 comentario:

Gonzalo dijo...

Me parece que en el relato están reflejadas algunas querencias personales... Interesante ejercicio de previsión. ¡iPhone 3!